Pagar o no en la primera cita

¿Dividir la primera cuenta o permitir que pague él? La semana pasada salió esta pregunta en uno de mis talleres, y realmente es un tema que preocupa a muchas mujeres solteras hoy en día, no solo por los temas de igualdad y feminismo que están actualmente tan calientes y que ponen en cuestionamiento muchas dinámicas en la interacción hombre-mujer, también por el uso creciente de sitios de dating y aplicaciones sociales como Tinder, que hacen de las primeras citas algo mucho más frecuente y fácil de realizar que hace un par de años atrás.

Y aunque las opiniones sobre igualdad y feminismo puedan ser prominentes hoy en día, las opiniones tradicionales siguen imperando tanto en hombres como en mujeres, manteniendo ambos la idea de que el hombre debiera pagar en una primera cita. Si el tema a ti también te preocupa, aquí hay siete buenas razones para permitir que sea él quien pague la primera cita

1.Las primeras citas son para recopilar información

Cuando comienzas a salir con alguien, sabes poco de esa persona. Y algo que quieres conocer son sus actitudes y reacciones, si es caballero, atento, generoso, educado, y cómo trata en general a una mujer en una cita. Si de inmediato sacas tu billetera y ofreces pagar o dividir la cuenta porque crees que es lo moderno o para no sentirte comprometida, ¿cómo vas a conocer su actitud natural? ¿Cómo sabrás si está interesado o es generoso? Relájate y observa lo que de él sale. Si él quiere que dividan la cuenta, te lo dirá o la cuenta quedará ahí por horas.

2. Cuando lo dejas ser proveedor, le permites sentirse bien

Cuando le permites pagar a él, le estás permitiendo “proveerte”, cuidarte, darte, y eso lo hace sentir muy bien. Esto no tiene nada que ver con el sexismo, ni con tus capacidades para auto-proveerte, sino con algo que viene de la época de las cavernas, cuando el hombre cazador llegaba con su presa y la ponía ante nuestros pies de mujeres como un trofeo esperando que la recibiéramos…nuestra receptividad suscitaba en él, y sigue suscitando, sentimientos poderosos conectados con su sentido de valor, de masculinidad, de autoestima. Y en nosotras, sentimientos de admiración. Si pagas tú, el mensaje que le das es que tú no necesitarás nada de él, o que te ocuparás de todo…y eso no es lo que tú quieres con un hombre adulto, ¿verdad? Ya habrá momentos en que podrás retribuir y cuidar de él…pero no en las primeras citas.

3. Le permites el cortejo y mostrar su interés

Si bien hemos avanzado mucho en el tema de la igualdad en muchos ámbitos, en lo laboral, en llevar el pan a casa, en compartir la crianza de los hijos, incluso en compartir los quehaceres del hogar, el cortejo no ha evolucionado. Al principio, un hombre intentará impresionarte y complacerte para ganar tu corazón. Es la naturaleza masculina. Tal como un pavo real, extenderá sus plumas de colores para deslumbrarte. Y pagar por ti es parte de eso. Si él no lo hace, puede ser una bandera roja e indicar que no es un hombre generoso, o que simplemente no está interesado en ti. Un hombre solo te «cortejará» al principio, porque ahí es cuando se despliega “la persecución”. ¿Por qué no dejarlo impresionarte, mostrar su interés y complacerte? Si te gusta, dale espacio para hacerlo. Disfruta la cita y déjale saber cuánto aprecias la comida, el lugar, su conversación y su compañía. Descubre cómo tu encanto y aprecio pueden atraerlo más que tu billetera.

4. Sientas un precedente para el futuro

Si no quieres terminar dividiendo cada cuenta por la mitad, no establezcas ese patrón desde tu primera salida. Muchas mujeres se apresuran a pagar para establecer su igualdad o para mostrarse independientes. Pero estas son las mismas mujeres que luego terminan quejándose de que su nuevo hombre se ha vuelto “cómodo” o es un “apretado”. ¡No se la hagas tan fácil desde un inicio! Por supuesto, corresponderás en algún punto y tendrás tiempo para mostrar tu generosidad. Puedes por ejemplo ofrecerte a pagar la película o el trago después de la cena en la segunda o tercera cita. Más tarde, cocinar una cena para dos y comprar los ingredientes, organizar un picnic matinal el fin de semana, o una clase de cocina juntos, etc. Pero la primera noche, espera a ver cómo te trata. Todo el mundo quiere mostrar su mejor versión durante las primeras salidas, así es que observa y descubre quien es él.

5. Te permite ver qué tan serio se toma las citas

El uso creciente de sitios de dating y aplicaciones sociales como Tinder, hace que las citas en la actualidad sean más fáciles de realizar, más frecuentes…y menos serias. Esto hace que muchos hombres las usen y salgan sólo para pasar una noche divertida. Por lo tanto, cuando un hombre paga la cena en una primera cita, es una buena señal de que se está tomando en serio las citas, y es más probable que esté buscando a alguien especial y una relación de verdad.

6. No le envías señales equivocadas

Algunos hombres piensan que cuando una mujer ofrece pagar, es una señal clara de que no está interesada. Y la verdad es que tienen razón. Este es un truco que muchas usamos o hemos usado  alguna vez cuando hemos salido con alguien a quien definitivamente no queremos volver a ver. Pero si el hombre que tienes enfrente te gusta, no pidas dividir la cuenta… podrías confundirlo.

O también ponerlo en un dilema social, al no querer arriesgarse a ofenderte si se niega a tomar tu dinero. Hoy por hoy, algunos hombres pueden sentirse atemorizados de ofender a una mujer al tener gestos que podrían interpretarse como un intento de control o un atentado a la igualdad. ¿Para qué complicarlo?

7. Cuando un hombre paga, no generas deuda con él

Algunas mujeres sienten que cuando un hombre paga quedan en deuda con él. Por ello consideran que es mejor dividir la cuenta, para no deber nada a un hombre a cambio de la cena. Estas creencias no tienen sentido ni base. No le debes nada a un hombre cuando te paga la cena, excepto una cálida sonrisa y un genuino “gracias”. Asume que eres merecedora de un acto de generosidad de parte de otro simplemente por el hecho de existir. Si él tiene otras expectativas, es problema de él, y probablemente no sea el hombre adecuado para ti.

¡Permítete recibir y disfruta de la caballerosidad…todavía no pasa de moda!

Y si necesitas prepararte para navegar con confianza el mundo de las citas, ¡acá en «Llamar a Tu Amor» estoy para ayudarte!