Cuando comenzamos una relación, generalmente tenemos una serie de comportamientos, hábitos y rituales de cuidado y cortejo hacia nuestra pareja que nos acercan a ella, que nutren el amor, y que permiten que la relación crezca. Sin embargo, con el paso del tiempo, el compromiso y la cotidianidad, comenzamos a olvidar estas rutinas, lo que nos desconecta.
Al restablecer estos comportamientos, podemos volver a encender el romance en nuestra relación, para mantenerla viva y energizada.
En el mes del amor, quiero recordarte algunos «buenos hábitos» para restaurar el romance en tu relación. Parte con uno o dos, luego comienza a agregar otros nuevos cada semana, para que el romance en tu relación ¡se convierta en algo natural y habitual!
1. Tengan rituales de aprecio diarios
Es fácil apreciar al otro al comienzo de una relación, y también es fácil olvidarse de hacerlo más adelante. Los cumplidos y/o aprecios fortalecen el vínculo, nutren la relación, llenan el estanque de amor.
Al terminar el día, antes de dormir si conviven, o antes de despedirse si no viven juntos, compartan a lo menos una cosa que cada uno aprecia, agradece o admira del otro, no importa cómo se sientan respecto a su pareja ese día. Puede ser una cualidad, un gesto, o un comportamiento que su pareja tuvo ese día. El propósito de este ejercicio es mover su atención desde lo que no les agrada hacia lo que sí les agrada de su pareja, y nutrir su relación con afecto. Empezarán a notar cada vez más cosas que les gustan de su pareja y ambos estarán más inspirados para hacer más por su relación.
2. Aprendan a conversar tomando turnos para hablar
Hablar es una de las cosas más peligrosas que hacemos. Y escuchar es la cosa menos frecuente que la mayoría hacemos. Cuando tomamos turnos para hablar y para escuchar respectivamente, sin interrupciones, nos sentimos verdaderamente escuchados, entendidos, más conectados y seguros con nuestra pareja. Y eso fortalece la relación.
3. Brinden cuando se sienten a cenar
No necesita ser con vino o champán, brinden con un vaso de agua, un té o una bebida gaseosa. Díganse algo que aman del otro, y luego beban. La idea es infundir valor al ser querido con nuestras palabras, resaltar sus logros, cualidades, apariencia física, personalidad o buenas acciones en lugar de criticar sus faltas. Estarán nutriendo el espacio entre ambos.
4. Hagan un pacto de cero negatividad
La cosa más común que las parejas hacen es criticarse y expresar un montón de frustraciones, con palabras, tono de voz, expresiones faciales o comportamientos. La negatividad es abuso invisible, y hace que nuestra pareja se sienta insegura, y sin seguridad nuestra relación nunca cambiará. Esto requiere aceptar que el otro es un ser distinto que nosotros, y estar abiertos y curiosos a descubrirlo. No necesitamos estar de acuerdo en todo con nuestra pareja, sólo mantener la mente abierta para descubrir el misterio que la hace única. Hagan una tarjeta semanal y anoten con un símbolo (una carita triste por ejemplo) las infracciones al pacto de cero negatividad. La primera semana estará llena de infracciones…pero semana a semana comenzarán a disminuir. Luego, celebren sus avances.
5. Hagan una lista de sus «días especiales» y celébrenlos
El día que se conocieron, un aniversario mensual o anual, y cualquier otra ocasión especial que antes celebraban pero que ahora no consideran importante. En esos días dense un tiempo de calidad juntos. Cocinen una comida especial, compren una tarjeta, escríbanse una carta, o una pequeña nota. Acuerden no olvidar esos días importantes. Tiempo de calidad es darle al otro toda tu atención, mirarlo a los ojos y estar centrada en él, no mirando tus mensajes de texto, hablando por celular, revisando tus correos, cocinando, leyendo el diario, etc.
6. Agenden citas de pareja
Si, pueden volver a tener citas después de haber estado juntos mucho tiempo. Volver a sentir la emoción, la anticipación de una cita bien planeada, arreglarse para la ocasión, puede volver a encender la chispa en su relación. Usen su mejor ropa, vayan a un restaurante elegante, tómense de la mano y conversen mirándose a los ojos como lo hacían en un inicio. Y no permitan que las obligaciones mundanas de la vida se interpongan en el camino de ese tiempo de calidad juntos. La prioridad es estar conectados, pasar tiempo solos, enfocados en lo que están compartiendo y en nada más.
7. Sean físicamente afectuosos
Al principio, las parejas se tocan con frecuencia: se toman de la mano, se acarician el cabello, la espalda, se abrazan, se besan, se dan masajes, se recuestan uno al lado del otro. Cuando el romance se aleja, por lo general las personas tienden a tocarse sólo cuando quieren tener sexo. Esto puede hacer que nuestra pareja se sienta usada y no amada. Todos necesitamos ese toque no sexual. El toque físico tiene poder emocional, y genera hormonas saludables para nuestra salud y longevidad. Desde niños, nos gusta ser abrazados y nunca perdemos esa fuerte necesidad de toque físico. Podemos suprimirla debido a traumas en nuestra vida, pero el toque afectuoso es esencial. Y puede generar más receptividad llegado el momento del contacto sexual.
Aquí hay 7 hábitos que pueden hacer mucho bien a tu relación. Invita a tu pareja a practicarlos con apertura, voluntad y curiosidad, para energizar su vínculo de amor. Y creen otros juntos: tomarse fotos juntos, darse sorpresas, salir de la rutina, leerse poemas, en fin, hay cientos de posibilidades.
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